Hotel Photo Zabalburu, Bilbao (ES) - Ofertas y Reseñas

Un hotel con sorpresas inesperadas

La limpieza fue impecable y el personal mostró amabilidad y disposición para ayudar. Además, la ubicación es conveniente para explorar la ciudad. Disfruté de la tranquilidad de la habitación.

Sin embargo, las paredes eran tan delgadas que se escuchaba todo lo que sucedía en las habitaciones vecinas, lo que dificultaba el descanso. El desayuno era bastante regular y no había opciones abundantes.

La cama tenía un somier blando.

La señora de recepción fue súper maja.

La habitación era pequeña pero cómoda. La ducha siempre tenía agua caliente, y el ventilador funcionó perfectamente. Me gustó que me dieron cama de matrimonio. La ubicación fue ideal para visitar la ciudad.

La ducha siempre tenía agua caliente, y el ventilador funcionó perfectamente.

El hotel está en obras de ampliación, lo que hace que sea difícil utilizar el ascensor. Las escaleras son estrechas y peligrosas, con mucha suciedad acumulada. Las habitaciones son pequeñas y hay problemas de humedad. El ruido de las habitaciones vecinas se siente demasiado, lo que afecta el descanso.

el hotel está en reformas y se escucha todo, las paredes son de papel, una experiencia inolvidable, pero negativa. Además, como ya no hay ascensor, pensé que me ofrecerían un upgrade o un buen trato, pero nada. a pesar de lo amable que fue el personal, no volveré, espero que se tomen las críticas enserio.

Ubicación increíble y buen trato

La verdad es que la ubicación es top, a pasos de todo. El personal fue súper amable, siempre listos para ayudar. La habitación estaba limpia y el baño, aunque un poco antiguo, funcionó perfecto. Solo que el tamaño era algo pequeño, pero me gustó. El bar del hotel tenía unos snacks muy ricos que disfrutamos después de un día de paseos.

la ubicación es muy buena, cerca de todo y hay buen transporte. el personal fue amable, siempre dispuestos a ayudar. la habitación, aunque pequeña, tenía cama de matrimonio y ducha con buen presión de agua. el wifi funcionó de 10, perfecto para cargar mis historias en insta. el lugar tiene ese toque único por las fotos en las paredes, está cool.

la limpieza fue horrible y el ruido de las habitaciones de al lado no me dejó dormir en toda la noche.

La limpieza era muy buena y el personal de recepción fue útil, dándole información sobre los sitios de interés, evitando las calles poco seguras. Hay un café justo frente al hotel donde puedes disfrutar de buenos bocados.

El ruido en las habitaciones puede ser molesto, se escuchan los golpes y voces de las habitaciones vecinas, lo que perjudica un poco la calidad del descanso.

Una estancia cómoda con servicio atento

El hotel ofrece una experiencia bastante aceptable. La habitación era amplia, con una buena presión en la ducha. El personal fue muy servicial, especialmente a la hora de recomendar lugares para comer en la zona. Consejo, pidan una habitación lejos del ascensor para evitar ruidos.

Super recomendado para una breve pausa.

Cómodo lugar, conveniente desayuno, especialmente rico en la cafetería del hotel, además tiene una buena conexión de transporte con un servicio de autobús desde el aeropuerto que para a solo diez minutos caminando.

No hay nada que mejorar.

Estuve tres días en este hotel y, a pesar de algunos detalles menores como el baño un poco anticuado, quedé gratamente sorprendido. La limpieza era impecable y la habitación muy amplia. Además, el desayuno me encantó. había mucha variedad. Sin duda volvería.

Buena ubicación y aparcamiento, pero el ascensor no estaba disponible y el desayuno era escaso.

La ubicación del hotel es perfecta, cerca del centro. Visitamos el Funicular de Artxanda y la experiencia fue increíble para los niños, especialmente para el nene. Además, el personal fue muy amable y nos asesoraron bien sobre qué hacer en la ciudad.

A mis hijos les hubiera gustado que tuviéramos acceso más fácil a las habitaciones, especialmente al usar carrito de bebé.

La habitación era pequeña, pero estaba cómoda y la ducha tenía buena presión de agua. La ventana daba a un patio interior, lo que no era ideal. Hicimos un par de reparaciones menores, como la puerta del baño que no cerraba bien. Aunque tenía su encanto con fotos de Bilbao en las paredes, el ruido de las otras habitaciones a veces era molesto, se escuchaban hasta los estornudos. En general, pasamos una noche tranquila, el agua caliente tampoco falló y eso se agradece.